A un año de enfrentamientos entre indígenas y colonos, la situación no ha variado pues el Gobierno incumplió sus promesas de desalojo, dice dirigente.
A un año de enfrentamientos entre indígenas y colonos en el Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (Tipnis), el Gobierno no ha cumplido con su promesa de desalojo de estos últimos, y más de 130 familias se asentaron recientemente en la zona, denunció ayer el presidente de la subcentral del Tipnis, Adolfo Moyé Rosendy.
Los violentos enfrentamientos del 26 de septiembre de 2009, que dejaron el saldo de un colono muerto, se produjeron cuando territorios indígenas del trópico cochabambino, en la zona de San Miguelito del Isiboro, fueron invadidos por productores de hoja de coca, que fueron resistidos por diferentes etnias.
Moyé señaló que, a un año de los sucesos, continúan los asentamientos en el lugar, y recientemente nuevas familias han llegado hasta la zona para plantar coca, sin que el Ejecutivo no haga nada al respecto, pese a que en su discurso oficial condena las invasiones al Tipnis.
“Mañana (por hoy) estamos entrando a la comunidad para poder evaluar la situación, pero ya está confirmado que más de 130 colonos del llamado sindicato 16 de Octubre están en la zona”, dijo Moyé.
Se quejó porque los colonos amenazan a los indígenas diciéndoles que, de no permitirles los cultivos de coca en sus tierras, no habrá ningún plan de desarrollo gubernamental en el Tipnis.
El dirigente agregó que, una vez aprobada la ficha ambiental de la carretera Villa Tunari (Cochabamba) - San Ignacio de Moxos (Beni), otras decenas de familias de colonos se han estado asentando en el Parque Isiboro Sécure, procedentes de Caranavi.
“Estamos preocupados puesto que el Gobierno no ha hecho nada para cumplir con su compromiso de desalojo. Ahora sentimos momentos de impotencia. Nos sentimos solos”, expresó Moye.
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