miércoles, 10 de julio de 2013

¿Y LA SOBERANIA ALIMENTARIA?


15 de agosto de 2012 a la(s) 21:35

La apertura a los transgénicos en Bolivia, se dio el año 1998, durante gobierno de Banzer, cuando el Comité Nacional de Bioseguridad aprobó la solicitud de Monsanto en calidad de bioensayos experimentales en Santa Cruz (evento 40-3-2).

Los años 2004 y 2005, durante los gobiernos de Mesa y Rodríguez Veltze se introdujo oficialmente al país el cultivo y consumo de soya transgénica (Soya RR Evento 40-3-2) mediante las Resoluciones Administrativas SENASAG 44/2005 y VRNMA 016/05 del 14/03/2005; la Resolución Multiministerial Nº 1 del 07/04/2005 y el DS 28225 del 01/07/2005

Desde la segunda mitad del decenio de 1990 se observa un incremento gradual de la producción de cuatro cultivos industriales: caña de azúcar, soya, maíz en grano y sorgo en grano. La siembra de soya transgénica aumentó significativamente en la gestión de Evo Morales, con el consecuente mayor uso de herbicidas, fungicidas e insecticidas.

A diciembre de 2010 el 92% de la soya boliviana era transgénica, con 44 variedades registradas entre 2004 y 2010. De casi un millón de hectáreas de soya, las variedades resistentes al glifosato representaban entre el 92 y 95%.

El gobierno del MAS rebajó a cero el arancel de importación de insumos agropecuarios, alegando que los campesinos “gastan mucho” en agroquímicos y maquinaria. Es así que mediante decreto supremo 0943 del 2 de agosto 2011, liberalizó el gravamen arancelario para la importación de tecnología, maquinaria, fertilizantes y agroquímicos por un período de cinco años.

Según el Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag), Bolivia importó 10.428,870 toneladas de plaguicidas en 2004, y 31.620.668 toneladas en 2010. En los últimos 10 años las importaciones nacionales de plaguicidas habrían aumentado en 150%, estima la Fundación Plaguicidas Bolivia (Plagbol)

Ley Nº 144, “Ley de la Revolución Productiva Comunitaria Agropecuaria”. (fuente: INSURGENTE)

Bolivia por fin se dota de tan esperada norma.

El Gobierno del MAS y los 2/3 de legisladores plurinacionales en el congreso, a la cabeza del defensor de los derechos de la Madre Tierra don Evo Morales Ayma han logrado plasmar una de las reivindicaciones históricas de las fuerzas que empujan el actual proceso de cambio.

Nos referimos a la aprobación de la Ley de Transgénicos, que para educar a la gente lleva un nombre un poco largo y confuso: Ley Nº 144, “Ley de la Revolución Productiva Comunitaria Agropecuaria”. Según Vicepresidente- Los movimientos sociales afines al régimen gobiernan el país, mostrando aún un perfil bajo, han lograron tramitar la tan esperada norma, Y A ESPALDAS DEL PUEBLO, que no hace otra cosa que reconocer lo que en la práctica ya se daba.

Recordemos que la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO), la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (ANAPO) y las organizaciones sociales matrices de los Empresarios Privados (CEPB), desde hace meses exigían a su gobierno la legalización de la soya o soja transgénica que es sembrada en el 98% en las extensas plantaciones agro empresariales de Santa Cruz.

Únicamente se oponían a esta medida modernizante y revolucionaria pequeñas ONG´s ecologistas, ambientalistas y campesinos de base, más algunos periodistas (seguramente de laoposición) que no han entendido el sentido del progreso que empuja nuestro hermano Presidente, además de la consolidación de la seguridad alimentaria sin soberanía, que se viene implementando tan exitosamente desde el Estado Plurinacional.

Algunos sectores , que aún tienen algo de sangre en la cara, trataron de ocultar los artículos de la nueva Ley que hablan de la legalización en Bolivia de los transgénicos, pero para alivio de los sectores sociales del proceso de cambio, eso fue rectificado; así de claro ha quedado normado en la Ley:

ARTÍCULO 19. (POLÍTICA DE INTERCAMBIO Y COMERCIALIZACIÓN).

II. Con la finalidad de lograr la soberanía alimentaria, se establecen los siguientes lineamientos: 5. Se establecerán disposiciones para el control de la producción, importación y comercialización de productos genéticamente modificados.

ARTÍCULO 15. (POLÍTICA DE PROTECCIÓN DE RECURSOS GENÉTICOS NATURALES).

I. En el marco de los Artículos 342 y 346 de la Constitución Política del Estado y la Ley N° 071, de 21 de diciembre de 2010, de Derechos de la Madre Tierra, el Estado Plurinacional de Bolivia, protegerá la biodiversidad, como sustento de los sistemas de vida y sus procesos naturales, garantizando la seguridad con soberanía alimentaria y la salud de las personas, para ello:

2. No se introducirán en el país paquetes tecnológicos agrícolas que involucren semillas genéticamente modificadas de especies de las que Bolivia es centro de origen o diversidad, ni aquellos que atenten contra el patrimonio genético, la biodiversidad, la salud de los sistemas de vida y la salud humana.

3. Todo producto destinado al consumo humano de manera directa o indirecta, que sea, contenga o derive de organismos genéticamente modificados, obligatoriamente deberá estar debidamente identificado e indicar esta condición.

Los artículos 15 y 19 son claros ya que se acepta alimentos genéticamente modificados (transgénicos) con la salvedad de estar debidamente “etiquetados”, aspecto de aplicación sencilla en ferias, tambos, mercados, calles, pueblos y ventas informales en general.

Gracias a los parlamentarios del MAS por pensar en los sectores agroexportadores, dedicados a los agronegocios, como somos los soyeros del oriente del país y los quinueros del occidente (90% de la quinua boliviana va para el extranjero). 

Ambos sectores sociales contamos con nuestras respectivas Cámaras de Empresarios, ambos exportamos la casi totalidad de nuestra producción y ambos seremos ampliamente beneficiados por el Seguro Agrario Universal “Pachamama”.

También felicitamos a los operadores principales del gobierno (Carlos Romero, dirigentes del Pacto de Unidad-CSUTCB-Bartolinas-Colonizadores, entre otros) por disponer de los recursos del Fondo de Desarrollo para los Pueblos Indígenas Originarios y Comunidades Campesinas–FDPPIOYCC para financiar toda la nueva Institucionalidad Pública que se construirá para hacer realidad la Revolución Productiva Comunitaria Agropecuaria, en virtud que dichos recursos del llamado Fondo Indígena, sólo eran destinados a los indígenas, mientras que ahora servirán para fortalecer los procesos burocráticos de la nueva institucionalidad, ampliándose los beneficios a los sectores productivos empresariales, es decir, ganaderos y agroindustriales. Como se ve, esta disposición va corrigiendo esa discriminación de otorgar recursos provenientes del Impuesto Directo a los Hidrocarburos IDH sólo para indígenas.

Es digno de destacar, finalmente, las disposiciones transitorias en esta Ley, particularmente la Décima Tercera que faculta al Instituto del Seguro Agrario-INSA a seleccionar a las “compañías aseguradoras privadas” que administren el Seguro Agrario Universal “Pachamama”, de acuerdo a reglamento. En realidad, cualquier empresa del sistema financiero privado que administre este seguro podrá hacerlo bien, ya que desde la asunción de Evo Morales a la Presidencia ningún sector como el financiero ha tenido ingresos elevados y permanentes, sin posibilidad alguna de ser afectado en sus intereses. Por todo esto, muchas gracias hermano Evo…

Atentamente, la oligarquía agropecuaria boliviana y transnacional que opera en este país.


El tiempo que el Movimiento al Socialismo (MAS) ha perdido descuidando el fortalecimiento del instrumento político, obviando planes para la formación de la conciencia crítica informada, y confundiendo participación con masividad, pudiera comenzar a pasarle factura. Alejandro Dausá ex embajador de Cuba en Bolivia















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